El viaje antes del viaje: una tarde para redescubrir cómo viajamos

Viajar puede ser muchas cosas. Puede ser lista, prisa, acumulación. Pero también puede ser deseo, emoción, descubrimiento y pausa. Desde ese lugar nació Le Periplo: de una necesidad personal de crear una guía que no fuera solo funcional, sino inspiradora. Que combinara estética, narrativa y emoción. Que ayudara a mirar una ciudad no solo con los ojos, sino también con el tacto, el gusto, el ritmo propio del destino.

Por eso decimos que nuestras guías acompañan el viaje antes del viaje. Desde que un lugar te empieza a llamar, hasta cómo decides moverte por él. Te invitan a imaginar qué harías si vivieras allí, a integrar la vida cotidiana del destino en tu experiencia.

Ese enfoque se materializa en recorridos geográficos coherentes, que respetan la identidad urbana del lugar. No son listas aleatorias: son propuestas con un sentido auténtico, que nacen de la experiencia directa: de observar, conversar, oler y probar.

Una de nuestras secciones más queridas —“Allá donde fueres, haz lo que vieres”— resume esta filosofía. Porque creemos que viajar también es integrarse: con respeto, intuición y empatía. Es una invitación a practicar un turismo consciente que transforma tanto al viajero como al destino.

El viaje no empieza en el aeropuerto, sino cuando algo en ese destino te llama. Y lo hace desde los sentidos: una imagen, un sabor, un color, una textura.

Todas nuestras guías están pensadas para activar todos esos estímulos. Desde el papel que elegimos hasta las rutas que proponemos, cada detalle busca conectar con la ciudad de forma viva, real y sensible, creando una conexión sensorial previa que culmina una vez que se pone pie en destino.

Y como en todo viaje sensorial, la gastronomía es una parte esencial. Nos habla de la historia del lugar, de sus tradiciones, y de un pasado y presente que conviven en armonía. En cada edición encontrarás esa mezcla entre lo que permanece —como una trattoria familiar de tres generaciones— y lo que se reinventa —como un local joven que reinterpreta recetas con respeto y frescura.

Este enfoque convierte cada guía en una verdadera experiencia sensorial de viaje.